Anunciación.- El proceso de ser madre es una experiencia que más enseña de humildad. En una palabra, la maternidad es un acto de entrega, más cuando durante esa dulce espera, la futura madre se encuentra sola con su hijo, sin su pareja o su familia. 

Cientos de mujeres viven su embarazo en circunstancias de total abandono e incluso sufren violencia y discriminación; estar embarazada no debiera ser un motivo para el señalamiento o la exclusión, cada recién nacido nace con los puños cerrados, como sujetando las emociones que le acompañarán por el resto de su vida, por eso, su nacimiento debe estar rodeado de amor, comprensión y una cálida cuna donde soñar en paz consigo mismo.

Así lo imaginó María Guadalupe Mariscal, fundadora de Vida y Familia México, Institución de Asistencia Privada constituida ante la JAPEM. En Vida y Familia se ofrece un hogar para las futuras mamás que por diversas circunstancias viven su embarazo en total abandono.

En Vida y Familia una de las prioridades es que las mujeres reciban cuidados de calidad antes, durante y después del embarazo, lo cual ayuda a disminuir complicaciones  para la mamá, pero también permite el sano desarrollo del bebé, pues de acuerdo con la Organización Mundial de la Salud (OMS), de los más de 135 millones de partos que se producen cada año, 20 millones presentan complicaciones posteriores como fiebre, anemia, fístulas, incontinencia, esterilidad y demás, y cada día, en el mundo, mueren más de 800 mujeres por complicaciones con su embarazo y el parto.

Con la esperanza puesta en las nuevas vidas que están por venir, durante 2017 durante 2017, en Vida y Familia se atendieron 3 mil 202 mujeres embarazadas (674 más que en 2016), quienes recibieron alojamiento, alimentación, atención médica y psicológica, así como cursos y talleres certificados que les han permitido prepararse para tener la opción de acceder a empleos mejor remunerados.

Actualmente la institución tiene presencia en 24 casas hogar y 13 oficinas de atención en 13 estados de la República Mexicana, la Ciudad de México y Brownsville, Texas en los EE.UU.

Gracias al apoyo que reciben las futuras mamás, ellas descubren un nuevo destino para ellas y sus hijos; recuperan su fe en la vida y son más conscientes de las miles de grandes y pequeñas decisiones que deber de tomar para el bienestar de ellas y sus hijos; esto les permite reconstruir una nueva vida, reintegrarse a la sociedad como mujeres productivas que contribuirán a educar a un mexicano más, valioso y único, cuyo destino será más prometedor y positivo.