Anunciación.- De acuerdo con el Alto
Ricardo Méndez Silva, del Instituto de Investigaciones Jurídicas (IIJ) de la Universidad Nacional Autónoma de México, señaló que vivimos una dualidad; por un lado, en el ámbito internacional rigen los derechos establecidos en la Conve nción del Estatuto de los Refugiados, una regulación virtuosa que muchos estados acatan; pero por otro, se enfrenta la afluencia masiva de personas que trastoca la vida de las naciones receptoras. El régimen es amplio, no se circunscribe a delitos políticos o conexos. Establece el principio de no regreso en las fronteras: si una persona huye de su país por temores fundados de persecución, no debe ser rechazado en los límites del territorio donde busca ser admitido, explicó. Es un principio fundamental del derecho internacional y a la vez, el que más se desconoce y viola. Estas faltas deben ser erradicadas en bien del espíritu de cooperación entre las naciones, indicó en ocasión del Día Mundial de los Refugiados, que se conmemora este 20 de junio. Huyen en medio del espanto, del asesinato de sus seres queridos; muchos de ellos lastimados físicamente y traumatizados. Las mujeres sufren abusos sexuales y los enfermos que padecen cáncer o diabetes, no son atendidos en el exilio. Lo más grave, es el arribo de infantes solos a Irak, Jordania, Líbano, Turquía o Egipto. Se perdieron en la travesía, sus padres fueron asesinados o no salieron del territorio en conflicto. El Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF) alerta de una generación perdida de niños y adolescentes.
Este año, en la conmemoración del Día Mundial de los Refugiados, la ONU solicita dedicar un minuto para reflexionar acerca de los dilemas que tienen que enfrentar los desterrados al huir para salvar sus vidas. “En realidad, todos los días deberían dedicarse de alguna manera a los millones de asilados en el mundo e involucrarnos en la solución de sus problemas”, concluyó. Informes |