Para saber si nuestro ideal es algo que valga la pena –por el esfuerzo y las cosas que dejamos para hacerlo realidad-, es preciso las propias posibilidades con las necesidades de los demás, porque todos requieren recibir ayuda: nadie se puede sostener solo.
Sin duda, cada asunto tiene su propio lugar. Para un estudiante, es prioritario dedicar suficiente tiempo a estudiar y sacar adelante sus tareas escolares. También conviene que los chicos hagan deporte, que tengan lecturas formativas, que aprendan a socializar en familia y con sus amistades.
Una IAP preocupada por este tema tan importante es Armonía Familiar, fundada en el año de 1992 con el propósito de poder ayudar a las familias y a sus integrantes.
Los primeros maestros de la vida, los que nos enseñan a vivir desde nuestra tierna infancia son realmente nuestros padres. Por eso es tan importante contar con ellos dos.
Son innumerables las personas que lo saben y pocos los que trabajan objetiva y certeramente para alcanzarla. Es más, debemos estar relativamente felices, si nuestro camino vital es el correcto, porque la felicidad completa la encontraremos solo en la otra vida, cuando gocemos enteramente de Dios.