Antes de la pandemia se hablaba de la tecnología que permitiría reducir los costos laborales. Ese proyecto no era sostenible, aun sin el coronavirus. Ahora se suman los estragos en la economía que pueden llevar a una reducción importante de puestos.
Antes de la pandemia se hablaba de la tecnología que permitiría reducir los costos laborales. Ese proyecto no era sostenible, aun sin el coronavirus. Ahora se suman los estragos en la economía que pueden llevar a una reducción importante de puestos.
Mientras tanto en México, una vez declarada la cuarentena; el 24 de marzo en Matamoros Tamaulipas, una pequeña de 13 años preocupada por la situación y consciente de la problemática que se avecinaba, comienza un proyecto con la intención de salvar vidas creando caretas para donación.
El Tecnológico de Monterrey, del campus Querétaro ha iniciado el proyecto titulado “Manufactura 3D integrada en hospitales”, tiene como objetivo fortalecer el sistema de salud mexicano frente al Covid-19. Una de las premisas es en administrar la falta de materiales esenciales.
Pues bien, convertirse en abuelos, no necesariamente significa ser viejo y mucho menos anciano. Los abuelos jóvenes, están en plenitud de la edad, en edad de producir con su trabajo bienes de toda clase: ciencia, servicio, enseñanza, empresas, negocios, instituciones, asociaciones civiles y hasta hacer política, además de procurar los medios económicos para su familia, en la que ya hay hijos autónomos y productivos, que han iniciado su propia familia.