Anunciación.-En el marco del Día Internacional del Aire Puro, instituido por la Organización Mundial de la Salud (OMS), la Red por los Derechos de la Infancia, Centro Mexicano de Derecho Ambiental, y el Poder del Consumidor, demandaron al gobierno federal y a los gobiernos estatales y municipales acciones coordinadas para reducir la contaminación atmosférica, con tres líneas de trabajo: atender el rezago normativo, impulsar políticas de gestión vehicular y mejorar el monitoreo atmosférico.
La demanda comprende en actualizar las normas mexicanas de calidad del aire para ozono y partículas con límites cercanos a los que recomienda la OMS, distribuir combustibles limpios, impulsar en forma decidida el transporte público de calidad, crear alternativas para desincentivar el uso del coche, promover el transporte no motorizado y ampliar infraestructura para ciclistas y peatones, generar estímulos para renovar la flota vehicular de carga, ampliar las redes de monitoreo atmosférico y garantizar la oportuna divulgación de sus registros.
Las organizaciones recordaron que la OMS estableció este día para generar conciencia y reflexionar acerca de los daños que ocasiona la contaminación atmosférica en la salud, así como las acciones que pueden adoptar los gobiernos para reducir los impactos, bajo el criterio de que “cuanto menor sea la contaminación atmosférica de una ciudad, mejor será la salud respiratoria (a corto y largo plazo) y cardiovascular de su población”.
En ese sentido, señalaron que en México la contaminación del aire causa padecimientos cardiopulmonares e infecciones respiratorias que derivan en disminución de la función pulmonar, el aumento en los casos de asma, cáncer de pulmón y la muerte prematura. Según cifras de la OMS, cada año se presentan en México 14 mil 700 muertes por enfermedades asociadas a la contaminación atmosférica. Entre los sectores más vulnerables destaca la población infantil, ya que la mortalidad por problemas respiratorios es la tercera causa de muerte en niños y niñas menores de 5 años de edad.
La población es cada vez más consciente de este problema. Una encuesta realizada en 2012 entre 2 mil 388 jóvenes del Valle de México reportó que el 83 por ciento consideraba no aceptable la calidad del aire y el 67 por ciento se consideraba en riesgo por el aire que cotidianamente respiraba. Más de la mitad 56 por ciento mencionó tener algún familiar con afecciones respiratorias o cardiovasculares.
Por ello, las organizaciones sociales demandaron que las autoridades mexicanas y sectores críticos como petróleo mexicanos apoyen la adopción de los parámetros recomendados por la OMS, en beneficio de la salud de los mexicanos.
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