Make-A-Wish ha cumplido mil 500 deseos y ha devuelto esperanza y fortaleza para combatir alguna enfermedad
Autor: Ivon Díaz Rojas
Fotos: Make-A-Wish IAP.
En sus 11 años de estancia en México, la Fundación Make-A-Wish ha cumplido deseos a niños con enfermedades críticas, para la Fundación los sueños cumplidos tienen una fuerza para brindar fortaleza y esperanza a los infantes más vulnerables en temas de salud. Labor que se ha extendido a nivel global, hoy, Make-A-Wish se encuentra en más de 39 países, entre los cuales destaca México.
En México, Make-A-Wish ha beneficiado a más de 20,250 personas, entre ellos, familiares de infantes con enfermedades críticas, en la actualidad la Fundación ha cumplido 1,500 deseos y con ello les ha devuelto la esperanza y la fortaleza para combatir cada enfermedad. De acuerdo con UNICEF, el juego permite a los infantes aprender y dar sentido al mundo que los rodea, mientras se divierten, trabajan en aspectos fundamentales en su desarrollo.
Así mismo, El Instituto Nacional de Salud Mental, por sus siglas en inglés (NIMH), menciona que, las enfermedades crónicas en niños y adolescentes pueden afectar el desarrollo físico, cognitivo, social y emocional, y también puede afectar a los padres y los hermanos.
Por esta razón y varios estudios, comprueban que un deseo cumplido en niños produce varios beneficios físicos y emocionales, incluso aumentan las probabilidades de supervivencia en los infantes.
Fundación Make-A-Wish busca brindarles una esperanza y un impulso a infantes con enfermedades críticas en conjunto con sus aliados, poder brindarles una sonrisa en medio de situaciones de salud difíciles, pues ellos consideran esta labor como un tratamiento emocional que fortalece su estado de ánimo.
La Fundación comenzó con la historia de Christopher Greicius, un niño de 7 años de Estado Unidos diagnosticado con leucemia, el sueño de Christopher era convertirse en un policía motorizado, fue entonces que, en 1980 en Phoenix, su comunidad unió esfuerzos para hacer realidad el sueño de Christopher.
Esta historia resultó en una gran inspiración para crear lo que hoy se conoce como Make-A-Wish a nivel global. Extendiéndose por varios países, todas con una misma misión y visión de brindar felicidad y esperanza a niños que luchan con enfermedades críticas.
Historias como la de Diego, un niño de 7 años con leucemia linfoblástica, quien sueña con conocer a Batman y convertirse en él por un día, Marissa diagnosticada con lupus, Emilio diagnosticado con enfermedad renal crónico degenerativa, entre muchas más, a quienes la Fundación ha cumplido sueños con la esperanza de transformar sus vidas y las de muchos más. Se han convertido en los rostros de la cusa de Make-A-Wish.