La Universidad Anáhuac, presentó estudio estadístico sobre los perfiles religiosos de estudiantes de nivel medio superior, con la finalidad de conocer mejor a los jóvenes de nuestro paìs.
Mediante comunicado se explica que el 73 por ciento de la población encuestada se autodenomina “críticos” e “indiferentes” a la Iglesia mientras que el 28 por ciento se considera “cercano”.
La investigación afirma que en todos los jóvenes hay un interés por reencontrarse con valores humanos y un rechazo a cuestiones de índole moral como el aborto, la corrupción, la eutanasia y la adopción de menores por parte de parejas del mismo sexo.
Sin embargo solo los jóvenes cercanos a la religión manifestaron una alta confianza en la familia, Dios, los amigos y la Iglesia y dicen tener inclinación a participar en misiones y en el auxilio de enfermos.
Por su parte, la población de jóvenes indiferentes a la Iglesia (35%) manifestó una gran similitud con los ‘cercanos’ en torno a temas como Dios, la Virgen María y hasta en la Iglesia católica, describiéndola como “una institución que nos acerca a Dios”.
Llama la atención que el 36 por ciento de los jóvenes encuestados (independientemente del segmento religioso) considera que la caridad es muy importante en su vida y el 45 por ciento se afirmo llevar alguna imagen consigo: La virgen de Guadalupe, el Crucifijo o el Rosario como protección.
La conclusión del estudio realizado a jóvenes de preparatorias públicas y privadas de México, Guadalajara y Monterrey concluyó que es una generación inquieta y necesitada y aunque la espiritualidad y la religiosidad disminuyen entre la población juvenil, es destacable el nivel de compromiso social y comunitario que persiste en este sector.