FUNFAI IAP transforma la vida de niñas y niños para convertirlos en verdaderos agentes de cambio
Autor: Carlos Hernández Huerta
Fotos: FUNFAI IAP.
La situación de madres solteras en México es un tema que muchas organizaciones atienden para apoyarlas a sacar a su familia adelante, proporcionando una ayuda destacable. Sin embargo, hay un tema que quizá sea poco atendido o incluso un tanto desconocido, y es la condición de madres que tienen a sus hijos estando en prisión, y que no cuentan con apoyos externos para criarlos.
FUNFAI IAP es una organización dedicada a transformar la vida de niñas y niños que nacieron en prisión o cuyas madres se encuentran privadas de su libertad sin una red de apoyo suficiente para la crianza de sus hijos. Desde su origen en 1989, la IAP ha contado con 3 objetivos claros para hacer realidad su misión y visión.
El primero de ellos, Impulsar el desarrollo integral. El logro en niñas y niños de alcanzar su máximo desarrollo cognoscitivo, psicológico, emocional y físico para favorecer que sean personas libres y autosuficientes, conforma un objetivo claro y preciso. Mientras el segundo, se enfoca en restituir los derechos de los niños y niñas. El tercer objetivo tiene como fin promover el vínculo con la madre y la familia. Y con esto se contribuye a que los niños rompan con el patrón de violencia familiar y comunitaria en el que se encuentran.
Pasando al modelo de intervención de la institución, éste se ramifica en cinco diferentes programas; comenzando con programa de cuidado y bienestar, donde aquí se proveen los cuidados básicos de hogar, comida, higiene y vestimenta. El programa educación desarrolla las facultades intelectuales y morales ya sea en educación formal o no formal.
El tercer programa aborda la salud, con un crecimiento integral en salud física, mental, emocional y un seguimiento en la nutrición. No se puede dejar de lado la recreación, por ello el cuarto programa, entretenimiento, cuenta con actividades físicas, arte, cultura y salidas que ayuden a los niños a recrearse, contando con tiempo libre.
Finalmente, la vinculación familiar y social se fortalece con el quinto programa. Desde una correcta reinserción social de los niños, escuela para padres, visitas familiares, hasta visitas y/o llamadas a la madre son las actividades que complementan este modelo de intervención.
En México solo 19 de 174 establecimientos penitenciarios estatales femeninos y mixtos tienen guarderías, lo que dificulta enormemente la crianza de niños a mano de madres reclusas, y si a esto añadimos que algunos estudios arrojan que las mexicanas presas pasan 23.5 años de su vida en prisión promedio, la labor se vuelve aún más complicada. En FUNFAI I.A.P. hacen todo lo posible por mejorar la vida de estos niños y les otorga las oportunidades para salir adelante, una labor de auténtico altruismo.