Se ha demostrado que, el tratamiento de cáncer refleja las desigualdades del mundo, pues los países con renta alta cuentan con tratamientos integrales en más del 90% de los casos, pero, los de bajos ingresos, la tasa es del 15%.  Un diagnóstico de cáncer puede empujar a las familias a la pobreza. De acuerdo con la Organización Mundial de la Salud (OMS).

 

Ya que la situación de países como México en materia de salud es preocupante para muchos, la sociedad civil ha levantado organizaciones que se preocupan por el tema de salud para los más vulnerables.

 

En México nació la Fundación sinaloense llamada Encauza; en el año 2007 se levantó como Institución sin fines de lucro para ayudar a mujeres diagnosticadas con cáncer de mama y cervicouterino, mujeres en situación vulnerable, en cuyas circunstancias son adversas en cuanto a la enfermedad.

 

Fue creada por la presidenta honoraria, Julia Rosalía Camacho Rojas, una sobreviviente del cáncer de mama, que experimentó la enfermedad y el tratamiento, poniendo a su disposición, todos los recursos para darle el apoyo a todas las mujeres que atraviesan por el cáncer. Impulsando campañas de detección oportuna en apoyo a todas las mujeres.

 

Inicialmente la Fundación Encauza comenzó atendiendo únicamente a mujeres, sin embargo, hoy en día también atiende a hombres diagnosticados con cáncer de próstata. Encauza se encarga de vincular a los pacientes con todos los tratamientos necesarios, instituciones y médicos; consiste en un acompañamiento completo en todo el proceso, desde la detección oportuna hasta la recuperación de la persona.

 

Su compromiso es contribuir con la reducción de la tasa de mortalidad en personas con cáncer. Mediante alianzas de alto impacto, comunidad resiliente e innovación aplicada a la ruta de la salud. Reducir los tiempos que afectan el diagnóstico de un paciente, así como el inicio de un tratamiento oportuno, generando una comunidad eficiente entre todos los actores involucrados en la enfermedad; desde el paciente, cuidador, hasta el médico, con el único objetivo de que juntos, contribuyan al bienestar del paciente.

 

Otro de los aspectos que la Fundación Encauza toma en cuenta, es de los primordiales y principales: trabajan para conseguir una gestión oportuna de medicamentos, tratamientos, insumos quirúrgicos, traslados y alimentación que se requieran para que el paciente sea diagnosticado oportunamente e inicie un tratamiento oportuno.

 

De acuerdo con la OMS, cuando una persona es detectada con cáncer, es difícil conocer el proceso y seguirlo, por lo que, durante poco más de 16 años, Encauza ha colaborado con los sinaloenses de escasos recursos, orientándolos en este caminar de combate a la enfermedad.

 

Encauza también brinda acceso a estudios de detección oportuna: antígeno prostático, mastografía, ultrasonido mamario, y Papanicolaou. Estudios complementarios y de alta especialidad: resonancia magnética, tomografía, gammagrafía ósea, biopsia, patología, entre otros. Además de contribuir a los tiempos de espera y en acelerar la programación de cirugía por tumor maligno.

 

Hoy en día, 3 de cada 10 casos de cáncer cervicouterino son detectados en etapas avanzadas. De acuerdo con Encauza. La detección oportuna y concientización son pieza fundamental para lograr la batalla contra el cáncer, tanto en hombres como en mujeres. Gracias a Encauza, historias como las de Vanessa Colio, Cipriano Ayala, Yara Castañeda, entre otros, han tenido otra oportunidad de vida y un acompañamiento de calidad.

El cáncer no espera, nosotros tampoco: Encauza