El camino de la felicidad no ha sido fácil: Angie
Se ha cumplido un año de la recuperación de Angie, una adolescente que luchó contra el cáncer dentro de la Fundación AITANA, y quien pasó 9 meses dentro de ella. Angie comenzó un tratamiento de quimioterapias en un orden de tomografías, resonancias, laboratorios y biopsias.
Enseguida recibió 9 quimioterapias para lograr la reducción del tumor. Con la finalidad de preparar su cuerpo para la operación y extirpación del tumor, sin embargo, el camino continúo con más quimioterapias de recuperación hasta la etapa final.
Angie describe la dificultad y dolor de pasar por una enfermedad como esta, pues durante su batalla por su salud, cuenta que en el proceso lo más difícil fue haber desarrollado mucositis (una inflamación de la mucosa que recubre el tracto digestivo) como el resultado secundario de las quimioterapias que recibió. Lo cual provocó que continuara internada en el hospital durante 21 días.
Posterior a esto, menciona que sufrió la pérdida de su pie. Una amputación por la que tuvo que pasar en la Ciudad de Mérida, despertar de la cirugía y no sentir esa parte de su cuerpo, le provocó una sensación de desesperación provocada por el adormecimiento, y darse cuenta de que ya no estaba más.
La forma en que Angie sobrellevó y enfrentó la enfermedad, fue adoptando una actitud positiva ante las circunstancias, por más adversas que fueran, ya que, lo que parecería como una pérdida de uno de sus miembros, ella decidió verlo como una oportunidad de salvarse del cáncer y comenzar una nueva vida. Agradeciendo haber tenido una opción, que, lamentablemente, muchos no tienen.
Después de mucho dolor y trabajo por pate de todos, su familia y la gran ayuda que recibió de la Fundación AITANA A.C., puede soñar de nuevo con una vida mejor. Angie ha contado un poco de sus deseos al vencer el cáncer, le gustaría retomar sus estudios, viajar, ejercitarse en el gimnasio, dibujar, y sobre todo, pasar mucho tiempo con su familia. Comer alimentos que no sean del hospital, aquellos que le causen sabores y sensaciones de nuevo, además de trabajar por su recuperación con sus visitas al psicólogo y rehabilitación de prótesis.
En la Fundación AITANA y durante su experiencia, resaltó haber aprendido que todos deben aprovechar la vida que tienen en sus manos, casa, familia, salud. Disfrutar a las familias y valorarlas, ya que el tiempo no debe desaprovecharse.
Fundación AITANA siempre fue clave importante de su recuperación, ya que dentro de la Institución fue donde pudo recibir todo el apoyo tanto psicológico, moral, y económico para su recuperación. Así mismo, AITANA la apoyó con medicamentos, comida, hospedaje y regalos, además de estar presente en cada etapa del proceso. El apoyo integral que recibió de parte de la Fundación fue imprescindible para ganar la batalla contra el cáncer.
AITANA, una sociedad civil sin fines de lucro para niños con cáncer que se enfoca en ofrecer bienestar integral a los pequeños que reciben tratamiento en el estado de Quintana Roo. Una luz de esperanza para niños con cáncer en México.
A través de recursos económicos, orientación y apoyo psicológico, Fundación AITANA busca contribuir a la recuperación y fortalecimiento de la integración social y familiar de los niños, de modo que puedan culminar su tratamiento con los mejores resultados posibles.
En la actualidad, la Fundación tiene su propia sede: «Casa Aitana», donde se reciben a los pequeños y se les ofrecen días de diversión y esparcimiento, junto a sus familias. Se realizan múltiples actividades, junto a sus hermanos y papás, o amigos, quienes los motivan siempre con su cariño y compañía. El objetivo de este lugar es brindar una esperanza de vida a niños y niñas de Quintana Roo con padecimientos oncológicos, además de tratar de hacer un poco más llevaderos sus procesos.
Después de su última quimioterapia, Angie presentó muchos sentimientos encontrados, aunque estaba feliz, también pasó por momentos de llanto y dolor. Sin embargo, se encontraba muy agradecida y contenta de haber logrado terminar una etapa tan dolorosa. El cáncer le enseñó a Angie a nunca rendirse, y de la misma manera, extiende un mensaje a todos los demás niños que están pasando por un proceso miliar, exhortándolos a no rendirse, terminar el proceso de la forma más positiva posible.
Angie también expresó su agradecimiento especial a la Fundación AITANA, por ayudarla de la forma en que lo hizo, con medicamentos, y sobre todo, a cada uno de los miembros dentro de la Fundación, que suplieron cada una de sus necesidades, y que fueron la fuerza para lograr su recuperación.
Fundación AITANA está fundada bajo historias reales como la de Angie y la de Aitana, el nombre de una pequeña que inspiró a la creación de una Asociación Civil con el compromiso de ayudar a niños con cáncer. Aitana fue una pequeña diagnosticada en julio de 2009 con Leucemia Linfoblástica de alto riesgo, en febrero de 2011, Aitana deja a sus familiares con un gran dolor por su partida, y es en ese mismo año su familia, en honor a su memoria, emprenden un viaje en pro de los niños con cáncer en el estado de Quintana Roo.
Una organización sin fines de lucro que tiene el propósito de brindar ayuda y mejorar la calidad de vida de los niños que luchan contra el cáncer.
En una sociedad donde los procesos de salud son muchas veces limitados e insuficientes, la Asociación pretende darle una oportunidad de luchar por la vida, a aquellos niños que sufren un proceso tan difícil, como lo es el cáncer.