Anunciación.- En la tradicional misa y ante miles de fieles reunidos en la Plaza de San Pedro, el Papa Francisco recordó la muerte de los inmigrantes durante sus viajes para llegar a Europa, como los 71 encontrados asfixiados en un camión en Austria e instó a cooperar con eficacia para impedir los “crímenes de estas masacres que ofenden al humanidad”.

S.S. Francisco dijo “los numerosos migrantes que han perdido la vida en sus terribles viajes, confió a cada una de ellas a la misericordia de Dios y a él pedimos que nos ayude a cooperar para impedir estos crímenes que ofenden a toda la familia humana”, agregó.

También recordó que en Harissa, en Libano, fue proclamado beato el obispo sirio-católico Flaviano Michele Melki, y que defendió a los cristianos “ante una tremenda persecución”.

Ante ello, pidió que ante la actual persecución de cristianos en Oriente Medio y otras partes del mundo, “la beatificación de este obispo mártir sirva para infundir en ellos consolación, valor y esperanza”.

“Qué también sea estímulo a los legisladores y a los gobernantes para que en todos los lugares sea asegurada la libertad religiosa, y a la comunidad internacional para que se ponga fin a las violencias y atropellos”, agregó.