
La democracia es la necesidad de inclinarse cada vez que sea necesario ante la sana y positiva opinión de los demás.
La democracia es la necesidad de inclinarse cada vez que sea necesario ante la sana y positiva opinión de los demás.
Querer gobernar siendo personalmente desordenado, es tan absurdo como querer escuchar la grabación de una aria de ópera interpretada por un mudo.
Todo lo que realicemos a favor de estos derechos, va a mejorar la vida y facilitar la felicidad de las personas.
La sociedad de consumo les ofrece libros en los cuales se afirma que en los “tiempos modernos” es una represión causado por un medievalismo moral desfasado y que es imperante realizar ya la “revolución sexual”, propia del siglo XXI.
Hay casos evidentes: el aumento de divorcios y de abortos son hechos que dañan directamente a la familia, célula y columna vertebral de la sociedad. Además, hay otros problemas humanos que también atacan a la institución familiar.