All Posts By

Soporte

Vivir la vida con sentido común 2>

El éxito es una habilidad que se necesita desarrollar constantemente y que debe estar acompañado por las virtudes humanas y sobrenaturales, para hacer continuamente el bien. con unidad de propósito.

Empieza cuando queremos. Querer es hacer las cosas con una voluntariedad firme y una buena inteligencia, que no acepta nunca una negativa, y que siempre está aprendiendo a hacer las cosas mejor.

Implica estudiar y luchar cada día para alcanzar la meta. Subir cada día un escalón y no bajar ninguno. Siempre aceptar nuestros errores.  Corregirnos y actuar como si ya hubiéramos logrado nuestras metas y seguir así hacia adelante.

En buena parte es una cuestión psicológica. Por ello, implica esforzarse   en hacer crecer las virtudes, especialmente   la fortaleza y la prudencia, hasta terminar con perfección el trabajo, que requiere de un modo u otro ayudar a los demás.

Descuidar las debilidades sería fatal, pues “el hilo se rompe por el punto más delgado.”  Hay que esforzarse para convertir las debilidades en fortalezas, es decir, en hacer el bien sin desanimarse.

Hacer las cosas por servir. Ni esclavo de personalismos ni de egocentrismo, sino generosidad.  El éxito trae la tranquilidad dela cumbre, que sirve para descansar y reponer fuerzas, y seguir adelante y hacia arriba con objetivos bien claros de lo que se desea alcanzar.

Aprender a trasmitir mis conocimientos y mi experiencia al que no sabe, y podré avanzar más.  Es decir, aprender a hacer de nuestra vida un éxito, hasta que la vida termine, trasmitiendo con alegría nuestra experiencia. Afrontar cada trabajo e identificar lo esencial del mismo, realizándolo en un 100%, aspirando a la perfección del mismo (sin ser perfeccionista). Lo cual implica cuidar las cosas pequeñas y no perderse en las insignificancias o detalles no importantes.

El mundo exterior me indica el nivel que puedo alcanzar, Pero interiormente puede uno crecer siempre en las virtudes, que son las fuerzas del alma.

La habilidad para pensar de este modo, me llevará a identificar y eliminar la barrera interna y negativa, que a veces existe en uno y que frena el trabajo. Al corregir la barrera interna, desaparece la barrera externa: el” Yo no puedo”, “es que”, “pensé que” “creí que” …

El éxito no tiene fin. Lo que hasta ahora se haya logrado es ganancia, pero es ineludible terminar bien el trabajo concreto, y empezar otro -aplicando la experiencia adquirida- como si fuese poco más que un punto de partida: no como una culminación.

El éxito en la vida consiste en seguir siempre adelante, con objetivos que –mejoran nuestras virtudes y desarrollan nuestras habilidades-  y que dan un sentido positivo a todo lo que hacemos. Y que ayudan a los demás.

El éxito en la vida nos impulsa a seguir siempre adelante, pero recociendo los errores y eliminándolos con los aciertos. Recuerde que el éxito es la realización máxima de su habilidad, pero especialmente incluye el mejoramiento de las virtudes “Compórtate como si el éxito fuera inevitable” (Anónimo), aunque en buena parte depende de uno.

Hemos de tener éxito en la vida, pero siempre acompañado de la felicidad.  Lo que implica hacer continuamente el bien, por amor a los demás, y rectificar la intención haciendo las cosas principalmente por amor a Dios.

Resumiendo, se trata de hacer de la vida un éxito en todos los aspectos, y para lograrlo, estar siempre animados.

Transforman vidas por medio del amor y la solidaridad 2>

 

Milagros Caninos es mucho más que una fundación; es un refugio de amor y esperanza para los perros que se han enfrentado a situaciones devastadoras. Brindar una segunda oportunidad a estos amigos de cuatro patas significan historias de fe y corazones solidarios que deciden apadrinarlos.

Reconocido como el primer santuario en América Latina, este refugio se ha convertido en un verdadero hogar para más de 300 perros y 40 gatos que, tras vivir situaciones de abandono, maltrato o sufrimiento, ahora gozan la oportunidad de llevar una vida digna.

Localizado en la Ciudad de México, este espacio ofrece a los perros alimentación, un techo seguro libre de jaulas, áreas especializadas según sus necesidades, pero más importante, amor. Milagros Caninos no solo es un refugio, sino una invitación abierta a conocer las historias y formar parte de su transformación de vida por medio del voluntariado y la convivencia con personas en condiciones especiales, fomentando la amistad entre humanos y perros.

La fundación fue inspirada desde el amor y la sensibilidad. Su labor no solo ha marcado la diferencia en la vida de los animales, sino que también ha generado conciencia sobre el maltrato animal a través de iniciativas como el Monumento al Perro callejero, ubicado en la esquina de la avenida Insurgentes Sur y la calle Moneda, al sur de la Ciudad de México.

Además, el proyecto involucra a personas con capacidades diferentes y personas de la tercera edad, quienes contribuyen al bienestar de los perros por medio de terapias, caricias y otros cuidados. Las personas con síndrome de Down y parálisis cerebral juegan un papel crucial, creando un vínculo beneficioso para ambas partes. Por otro lado, los adultos mayores encuentran compañía y actividad por medio de la interacción, lo que mejora su estado emocional y físico.

La fundación ofrece una única forma de apoyo a los perros rescatados mediante el apadrinamiento, una alternativa a la adopción que permite a las personas crear un vínculo especial, además los donantes no solo contribuyen con el bienestar de un solo perro, sino a la mejora de todos los que viven en el santuario.

Gracias a la dedicación de su equipo y al apoyo de donaciones, Milagros Caninos continúa siendo un símbolo de esperanza y compasión para los más vulnerables.

Desde la Revolución Mexicana, Clara Moreno apuesta por la niñez mexicana en situación de abandono 2>

 

Al terminar el año 2024, de acuerdo con datos del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), existen más de 36.3 millones de niños y adolescentes residen en México, lo cual representa un 28.1 por ciento de la población total del país.

Sin embargo, pese a las cifras de población joven en México, los datos de instituciones como UNICEF, han arrojado que más de la mitad de ellos viven en situación de pobreza y 4 millones viven en pobreza extrema. Esta situación solo se ha acrecentado con el paso del tiempo, ya que, desde la Revolución Mexicana, el abandono y la orfandad estuvieron presentes en todo México, provocando que las infancias no tuvieran un lugar digno donde vivir y fueran privados del derecho a la educación.

Fue precisamente durante la Revolución Mexicana, que nació una de las organizaciones más antiguas de México, Fundación Clara Moreno y Miramón IAP, una institución con una historia de más de 105 años trabajando por la niñez y adolescencia mexicana, para brindarles educación y asistencia a la infancia de escasos recursos o que por diversas situaciones han sido abandonadas o han sido víctima de la orfandad. Propiciando atención a los requerimientos básicos como alimentación, alojamiento, educación y salud dentro de una casa y escuela.

En 1917 se constituyó legalmente en la Ciudad de México, dando alojamiento, alimentación, educación y salud hasta el día de hoy, después de más de 100 años de historia y cambio. Las condiciones de abandono de los infantes han tenido diferentes factores en la sociedad, pero que a todos los sitúa en condiciones de riesgo como la inseguridad y la pobreza.

No obstante, la fundación se ha reinventado con el paso de los años para lograr adaptarse a las necesidades de las infancias en México. Fundación Clara Moreno y Miramón suspendió sus actividades como escuela y comenzó a canalizar a las niñas a escuelas públicas de la zona en 1999. Se dio a la tarea de atender a niñas y adolescentes en riesgo de calle, para que puedan acceder a oportunidades de desarrollo, y puedan tener una vida libre de violencia ejerciendo sus derechos.

Durante una trayectoria de más de 100 años, la fundación ha beneficiado a más de 120,000 niñas y adolescentes en situación de vulnerabilidad, les ha ofrecido una mejor calidad de vida, opciones y oportunidades, logrando afectar de forma positiva también a sus familias y sus comunidades, y así, multiplicar la ayuda. Ya que su compromiso más grande es con la niñez mexicana.

Fundación Clara Moreno y Miramón, es un ejemplo práctico del quehacer de las Organizaciones de la Sociedad Civil (OSC) en materia de asistencia social. Muchas que surgieron de épocas de guerra como esta, para brindar ayuda a los sectores de la sociedad más vulnerables.

La institución ha mantenido sus actividades gracias a los donativos de otras instituciones gubernamentales y empresas privadas, pero también se dan a la tarea de realizar actividades recreativas para reunir fondos como: conciertos, ventas de garaje y otras actividades.

Actualmente, su aportación a la sociedad tiene un valor muy importante en cuanto a la asistencia social de las niñas de México, quienes, en caso de no contar más con los fondos necesarios para lograr su sobrevivencia, muchas niñas y adolescentes se verían afectadas por esta situación.

La razón por la que la Fundación Clara Moreno y Miramón IAP, decidió enfocarse en albergar y educar solamente a las niñas y adolescentes, es debido a la violencia de género en la actualidad y a la falta de acceso a sus derechos, y debido a que los recursos no son suficientes para albergar a todos.

En la institución son recibidas las niñas y adolescentes que provienen de familias desintegradas y disfuncionales a través del DIF, ya que trabajan en conjunto para lograr ser canalizadas.

Además de trabajar en conjunto con el DIF, trabaja de igual forma con la Fundación Dr. José María Álvarez, permitiéndoles continuar con su labor en el apoyo de las niñas y adolescentes de México que se encuentran en peligro y amenazados sus derechos.

Actualmente, la fundación continúa su labor de acompañar y encausar a las niñas en su desarrollo personal y educativo, hasta que logren la mayoría de edad y poder continuar dándoles un seguimiento.

Ya que hoy, al igual que en la Revolución Mexicana, las necesidades de un hogar siguen siendo una realidad y más creciente aún.

Paisano y bastión, Serrano Limón 2>

Una tarde fría de invierno, trabajando como el solía, haciendo y dejando hacer, dialogando, que, no imponiendo, su corazón dijo basta y se fue para siempre -como se van los grandes- dejando imborrable el recuerdo del amigo, del luchador, del maratonista, del padre de familia y del polémico, Jorge Serrano Limón.

Lo conocí bien, con frecuencia desayunábamos, discutíamos, reíamos, rezábamos y dialogábamos, como lo hacen los amigos. Cuatro aspectos de su vida me impactaron siempre: su fortaleza y disciplina, su amor a la vida, su inquebrantable fe y la calidad y calidez de su trato, especialmente a su mujer Magda y los suyos.

Jorge nació en la ciudad de México hace 71 años, inició sus estudios en la escuela primaria Benito Juárez y los terminó cursando la carrera de Administración en la Universidad Latino. Hijo de Gustavo Serrano Mass, abogado Penalista de la Libre de Derecho y sobrino nieto de Ana Mass de Serrano, conocida profesora de filosofía de la UNAM, cercana al Maestro Vasconcelos.

Casado y con 7 hijos. Desde 1978 Jorge trabajó en la promoción y defensa de la vida, tema en el que vio siempre más allá, con claridad meridiana, como más allá vieron los que siempre a la venta o uso de los hombres de color en siglos pasados y fueron tachados de radicales locos o los que reclamaban el derecho al voto de la mujer cuando ella tenía prohibido acercarse a las urnas.

El día que todos reconozca al óvulo y al espermatozoide como seres vivos que al unirse forman una vida humana única e irrepetible, todos entenderán mejor al Serrano Limón que se nos ha marchado.

Pienso en una cena en los años 80s en la ciudad de Monterrey en la que el Dr. Bernard Nathanson, fallecido apenas hace 11 años, mejor conocido como el rey del aborto por los más de 60 mil abortos que practicó, reunión en la que él mismo taciturno como era, acompañado de su esposa comentaba que gracias a la ciencia alcanzó a ver con claridad que desde la concepción lo que existe es un ser humano vivo y que por esta razón su vida dio un giro de 180 grados y destinó el resto de su existencia a defenderla y promoverla.

Ese es Serrano Limón, al que era común verlo correr por los viveros de Coyoacán a las 5 de la mañana, que participó en más de 90 maratones y presumía de haber dado 4 veces la vuelta al mundo desde su ecuador, el de los métodos de comunicación masiva cuestionables y creativos, ese  luchador de la vida que trabaja afuera de los hospitales del país  y de Latinoamérica tratando de convencer a quienes van a abortar de que no lo hagan, ese Jorge que, con la gracia de Dios consiguió evitar decenas de miles de abortos, se nos ha ido.

Ayer por la noche al saber de su muerte se instalaron en mi mente y no se han ido, las palabras que hace más de dos mil años escribió San Pablo, antes de morir, a su amigo Timoteo: “He peleado la buena batalla, he acabado la carrera, he guardado la fe. Por lo demás, me está guardada la corona de justicia, la cual me dará el Señor, juez justo, en aquel día; y no solo a mí, sino también a todos los que aman su venida”.