La imagen que proyecta el personal de una empresa es un punto clave para la supervivencia y competitividad de la misma, así lo informó una firma especializada en diseño e imagen pública.
Mediante comunicado, la firma de diseño explicó que el descuido de la imagen, principalmente en los hombres, manifiesta desconfianza, incapacidad, deficiencia y falta de profesionalismo.
En nuestro país sólo uno de cada cinco hombres sabe vestir correctamente un traje. Es por eso que la firma pone a disposición del público consejos útiles para proyectar una imagen profesional.
1) La apariencia y vestimenta deben respaldar la posición. Si se ejerce un puesto de autoridad y liderazgo, la imagen proyectada debe mostrar: capacidad, conocimientos y experiencia. De nada sirven muchos años de estudio y preparación si la imagen no los proyecta. La imagen debe hacerte el camino más fácil, no convertirse en un obstáculo.
2) Saber vestir. Reconocer la forma del cuerpo es crucial para poder proyectar una imagen de alto nivel. De esa manera se podrá elegir qué tipo de ropa favorece a cada individuo. Ejemplo: un traje de dos botones lucirá mejor en un hombre delgado y de talle corto, mientras que uno de tres será mejor para un hombre de baja estatura; una camisa de vestir de cuello italiano le va mejor a un hombre de cara alargada; la corbata de rayas diagonales ayuda a ensanchar el torso de un hombre delgado; un nudo angosto de corbata lucirá mejor en un hombre de cara redonda; Pantalones con valenciana serán recomendables para un hombre alto.
3) Identificar los colores que se adecúan mejor con el tono de piel. Algunos hombres conocen el significado de los colores, es decir, la psicología del color. Pero en cuestión de imagen personal masculina saber ese significado no es suficiente. Entra en juego la colorimetría, o sea, la armonía que guardan los colores que se usan cerca de la cara con el tono de nuestro cabello, ojos y piel. “Todo hombre que aprenda y domine el tema del color en su vestimenta se distinguirá de cualquier otro, proyectando el mensaje que desea y luciendo más capaz y seguro”.
4) Conoce los códigos de comunicación en la ropa para proyectar autoridad y accesibilidad. La ropa es en sí mismo un código de comunicación no verbal. Por la vestimenta de un hombre se sabe qué profesión tiene, su jerarquía en la empresa (operativo, mando medio, directivo), su nivel educativo, social y económico. Por ejemplo, un código de autoridad en la vestimenta masculina es el uso de mancuernillas (las cuales no deben de ser estrictamente de una marca cara), lo importante es que comunican poder y autoridad.
Asimismo, los colores lisos proyectan más poder que las prendas con patrones como rayas o cuadros, que comunican accesibilidad.
5) Evitar los errores de imagen más cometidos por los hombres, tales como:
a) Usar zapatos sin lustrar, desgastados o sucios.
b) Usar la talla incorrecta en la ropa.
c) Usar joyería. La única joya permitida es la argolla de matrimonio. El reloj no entra en esta categoría. Es un accesorio.
d) Portar el teléfono celular en el cinturón.
e) Guardar la pluma en la bolsa de la camisa.
6) Nunca olvidar el entorno profesional en el que se desenvuelve y el puesto que se ejerce. Usted es la imagen de la empresa donde trabaja, su apariencia su logotipo.
7) La higiene personal debe ser impecable. Un hombre de negocios respetable siempre cuida su higiene personal. La pulcritud es bienvenida en el mundo de los negocios, e incluye el peinado, salud de tu piel, aroma, aliento, manos y uñas recortadas.
La imagen de alto nivel impulsará el éxito que se desea logrará.