Anunciación.- Un historial de esfuerzos de conservación federales que incluyen la creación de una reserva y la prohibición de la pesca y el uso de redes por dos años no han podido lograr salvar a la Vaquita Marina.
La Vaquita Marina o Cochito (phocoena sinus, Norris & McFarland 1958), es una especie endémica de México, específicamente del área del Golfo de California, entre Puertecitos, Baja California Norte, y el norte y este de Puerto Peñasco, Sonora.
Uno de los primeros cálculos de la población de la Vaquita tuvo lugar en 1997 por los investigadores Jaramillo-Legorreta, quienes hicieron una medición transversal y determinaron la población total en 567 individuos. Desde entonces, la pesca indiscriminada y el uso de redes para la captura de la totoaba -otra especie de la zona que se comercia hasta por 8 mil dólares el kilo de su vejiga natatoria a pie de playa- han diezmado la población de la Vaquita, convirtiéndolo en el mamífero marino más amenazado del planeta, con apenas 60 individuos sobrevivientes estimados en 2016.
Aunque el gobierno federal mexicano ha invertido millones de pesos pagándoles a los pescadores locales para que no utilicen redes de enmalle, la corrupción y la pesca ilegal de totoaba han profundizado la crisis de la Vaquita. En este sentido, la Asociación Mexicana de Hábitats para la Interacción y Protección de Mamíferos Marinos (AMHMAR), se acercó a comienzos de 2016 a Pablo Careaga, emprendedor y consultor especializado en el desarrollo de proyectos que generen valor socio-ambiental, para investigar la condición real de la Vaquita y ofrecerle una oportunidad de supervivencia.
El documental #SOSVaquita es el resultado de más de cuatro meses dedicados a la investigación in situ en Baja California, Sonora, San Diego y Ensenada sobre el problema de la pesca ilegal, de largas conversaciones con los pescadores locales, de interacción con grupos activistas por los derechos de los animales como Sea Shepherd, y de análisis de las oportunidades reales de una especie que pareciera haberse convertido en la punta de lanza de un movimiento conservacionista renovado en México.
“La experiencia de organizaciones como la AMHMAR es vital para lograr cualquier avance en relación con la conservación de la Vaquita Marina. Organizaciones como ésta tienen el conocimiento y la experiencia, además de manejar estándares internacionales que podrían permitir un escenario de reproducción en cautiverio para la Vaquita” asegura Careaga. “La oportunidad es única para unir los esfuerzos muy loables del gobierno federal por evitar la pesca ilegal con el know how de expertos en cetáceos que manejan cientos de ejemplares en las mejores condiciones posibles para su mantenimiento”.
Rodrigo Constandse, presidente de la AMHMAR, considera que el proyecto de rescate de la Vaquita “es uno de los tantos programas en los que estamos ofreciendo nuestra experiencia y conocimiento sobre el manejo de delfines, marsopas y cetáceos en cautiverio. Aún hay una oportunidad para la Vaquita y queremos compartir la responsabilidad de su conservación junto con la comunidad” aseguró.
La AMHMAR ha implementado una política de apertura e inclusión que busca promover el diálogo y escuchar las voces de todos los involucrados en la conservación de la Vaquita. El financiamiento de este documental fue el primer paso pero será en el 2do Congreso de Bienestar Animal a celebrarse en la Ciudad de México el 5 y 6 de Octubre de este año donde habrá un espacio para que científicos, empresarios, ambientalistas y medios, dialoguen, entre otras cosas, sobre el camino a recorrer para salvar a la Vaquita.