Sanan heridas en comunidades Tsotsiles de Chiapas
Autor: Carlos Hernández Huerta
Fotos: Sanando Heridas AC.
Las condiciones en las que viven varias comunidades Tsotsiles en Chiapas son de pobreza y pobreza extrema. El acceso a servicios de salud es muy limitado, y en ocasiones las familias deben viajar más de dos horas para llegar a un centro de salud en San Cristóbal, aunque no siempre encuentran los servicios adecuados, lo que los hace desplazarse a Tuxtla, que implica un viaje de hora y media más, convirtiendo un trayecto de casi cinco horas de distancia, sin mencionar el costo que conlleva recorrer estos desplazamientos.
Sanando Heridas AC llegó en 2008 para intervenir en esta línea de acción, ofreciendo servicios médicos con la particularidad de incluir la interculturalidad en su trabajo, porque cuentan con una traducción e interpretación del Tsotsil al español de parte del equipo de la asociación con el propósito de brindar servicios de salud integrales.
Leticia Aguilar, directora general de Sanando Heridas AC, compartió para Somos Hermanos la labor que realizan desde hace quince años y cómo a través de sus distintos programas han podido beneficiar a más de 30,000 personas atendidas.
“Nuestro primer programa Sanando ofrece la consulta médica primaria que se da en las comunidades y también tenemos una clínica en San Cristóbal de las Casas donde se encuentran nuestras oficinas de operación. Se incluyen en este programa consejerías médicas y atención especial a tres grupos de vigilancia que son planificación familiar, a mujeres embarazadas y crecimiento y desarrollo en niños y niñas de 0 a 5 años.”
Adicional en el mismo programa cuentan con acciones de gestión para la atención médica donde se encargan de dar seguimiento a casos especiales que requieran de apoyo adicional. Un eje transversal en todos los programas son los derechos humanos, que junto a la interculturalidad se unen para cubrir la cosmovisión de las comunidades Tsotsiles. El siguiente programa en la lista es Educando, del cual Leticia Aguilar profundizó:
“Este programa tiene una filosofía impresionante porque manejamos la parte de la prevención con talleres y ciclos formativos haciendo un trabajo con las escuelas rurales de los 4 municipios con los que colaboramos. Los ciclos que hemos impartido han cubierto desde higiene básica en escuelas primarias, a educación sexual en las secundarias, en este segundo abriendo una brecha debido al tabú que se tiene. Actualmente nos pidieron un ciclo formativo de menstruación y estamos iniciando esta intervención en las comunidades.”
Un distintivo especial en Sanando Heridas AC, y que tiene que ver con el tercer programa es la forma en que se involucran las comunidades. Participando lleva por nombre y la asociación utiliza el diálogo para conectar desde autoridades, comités de familia hasta directivos y maestros. Mediante ferias y campañas se detectan a nuevos pacientes que necesitan de algún servicio de salud.
El origen de Sanando Heridas AC se remonta a un grupo de empresarios, que buscando en las comunidades de Chiapas se encontraron con niños y mujeres con quemaduras a causa del fogón, lo que los hizo organizar una subasta para recabar fondos y ayudar con los tratamientos. Debido al éxito obtenido, se decidió crear una asociación en 2007, lo que dio paso un año más tarde a la constitución de Sanando Heridas AC.
Tomar en cuenta de la sabiduría en tradiciones y saberes de las comunidades fue importante para el origen de la fundación, siempre estableciendo un diálogo y respetando los derechos de sus habitantes.
“Durante estos quince años, Sanando Heridas a base de cumplir con su palabra y a base de atender a la gente hemos hecho diagnósticos de las necesidades de la comunidad, siempre hablando con la verdad y en un diálogo de saberes y de confianza, para realmente dar lo que podemos ofrecer. Hemos visto el impacto positivo en un modo estadístico, con la disminución de diversas enfermedades en las zonas donde trabajamos, con una intervención integral en las comunidades.” Comentó Leticia Aguilar acerca del impacto de acción en la asociación.
Agradecer no solo a las fundaciones que les han apoyado en este camino, o a las comunidades por su apertura, sino también a la red de donantes que han apoyado a seguir con la labor fue importante para Leticia, porque sin la confianza de todos ellos, no se habría llegado a un impacto de más de 60,000 servicios de salud brindados. De igual forma Leticia invitó a cualquier interesado que quiera apoyar a Sanando Heridas AC, a través de su página institucional que incluye sus redes sociales, espacios que proyectan todo el actuar de la organización.
Como adición, Leticia ofreció unas palabras para que se acerquen a Sanando Heridas AC: “Quisiera invitar a las personas primero a que se quiten el sesgo de las AC acerca de la malversación de fondos. Existimos organizaciones que hemos trabajado varios años hasta la médula para sacar adelante el proyecto. Yo los invito a que se acerquen a las AC, a que retomen confianza, en Sanando Heridas las puertas están abiertas a que conozcan de primera mano lo que hacemos.”
Existe mucho trabajo en la Sociedad Civil y con pocos recursos hacen cosas impresionantes. Es tiempo de apartar las etiquetas y conocer lo que muchas organizaciones realizan en favor de las comunidades vulnerables.