SÍNTOMAS DE DECADENCIA EN UN PAÍS DEMOCRÁTICO (1 de 2)
Es curioso, Platón en el c capítulo 3 de su libro La República va señalando los síntomas de la decadencia de un país democrático: En asuntos públicos, los ciudadanos, los ciudadanos aceptan a sus gobernantes sólo porque éstos les permiten obrar los peores excesos; por ejemplo, llaman “imbécil” a quien obedece las leyes.
En asuntos familiares, los padres por miedo no se atreven a corregir a sus hijos; mientras los que los hijos, para “ser libres”, desobedecen a sus padres, ultrajando la autoridad paterna.
En el aspecto educativo, el maestro teme al alumno y el alumno desprecia al maestro por incapaz y apocado.
Los jóvenes adoptan aire de ancianos, y los ancianos –acomplejados- se toman el pelo entre sí, procurando imitar a los jóvenes; las mujeres adoptan las formas de vestir de los hombres, etcétera.
Cuando platón escribió esto lo hizo con el fin de llamar la atención o de ridiculizara quienes se comportaban de esas maneras. Lo escribió en tono de broma.
Por el contrario, en nuestros días son incontables los pseudoescritores que escriben libros en plan serio, con ideas semejantes a las ridiculizadas por Platón. Y lo que es más grave, tales libros se venden a millares para un tipo de lector –que los compra- pensando encontrar en ellos la revelación de grandes verdades.
¿Qué los jóvenes están impacientes por desarrollar su visa sexual? La sociedad de consumo les ofrece libros en los cuales se afirma que la castidad es una represión causada por una sociedad que no tiene idea de la realidad actual y por un medievalismo moral desfasado, y que es imperante realizar ya la “revolución sexual”.
¿Qué en el cuerpo de una mujer despierta por “mala suerte” una vida? No falta quien dejándose seducir por el argumento tan gastado de que puede “interrumpirse el embarazo”, compre un libro que proclame que el aborto es un “derecho” de la mujer y divulgue esa idea casi como un dogma y hasta un derecho.
¿Qué los hijos no obedecen? ¡Pues que los padres dejen de mandarles! ¿Para qué torturar a los pequeñuelos con órdenes
¿Qué en la escuela los alumnos ya no estudian? Muy sencillo: no exigir en la educación escolar, La escuela de la vida es más que suficiente. Lo verdaderamente importante es discutir los problemas sociales: es una tontería emplear a los maestros porque ya no se trata de aprender materias, sino de criticar los valores mismos en los que se apoya la sociedad legada por nuestros mayores…Valores que han sido respetados durante muchos siglos por numerosas generaciones.