SUSTITUYA LA ACTITUD DE POQUEDAD. POR OTRAS DE SANA SUFICIENCIA

Autor: Gabriel Martínez Navarrete

Imagine en su mente un retrato de usted mismo triunfando.

Siempre que un pensamiento negativo llegue a su mente, sustitúyalo con un pensamiento positivo.

No levante monumentos a las dificultades en su imaginación.

No crea que los demás valen más que usted. Recuerde que -en general- los demás están tan asustados como usted.

Frecuentemente cada día repita estas palabras: “Si Dios está con nosotros, ¿quién podrá contra nosotros”? (Rom 8,31).

Averigüe si tiene algún sentimiento de inferioridad que le perjudique.

Practique a menudo la siguiente actitud bíblica: “Todo lo puedo en Aquel que me conforta” (Fil 4, 13).

Tenga un gran respeto hacia usted mismo y hacia los demás. Actúe con dignidad.

Si está usted haciendo el bien y lo que debe hacer, onvénzase de que ahora mismo está recibiendo de Dios todos los poderes que necesita, para alcanzar lo que pretende. “El hombre bien preparado para la lucha ya ha conseguido el triunfo” (Miguel de Cervantes).

Recuerde la promesa de Jesucristo: “Yo estaré con vosotros hasta el final de los siglos”.