Anunciación.- Las niños con discapacidad intelectual  y problemas de aprendizaje suelen tener limitaciones de respuesta y comprensión sobre  su entorno por ello necesitan juguetes especiales que les permitan facilitar la recepción de información externa y percibir estímulos sensoriales benéficos para su desarrollo metal y psíquico.

Con el juego los niños pueden estimular el cerebro y generar importantes modificaciones que mejoren el aprendizaje. Los juguetes además se poder ser utilizados como instrumento de estimulación, también puede ayudarles a socializarse con los demás niños, a aumentar su autoestima, a progresar, a deducir y extrapolar el aprendizaje a otros ámbitos, pero sobre todo divertirse.

Es sumamente interesante iniciar, desde los primeros meses, la estimulación temprana con niños con discapacidad  por medio de juguetes, sin embargo, hay que tener en cuenta el peligro de no caer en una estimulación desmedida o exagerada, pues ello, podría ocasionar una falta de interés y de motivación.

En general, cualquier clase de juguete podría ser válido para estos de niños. A pesar de ello, con respecto a la edad, es fundamental reiterar que las informaciones facilitadas por las empresas tienen que ser siempre orientativas, sobre todo, teniendo en cuenta en los niños con discapacidad, pues su avance evolutivo no es igual que en el resto de niños.

En este caso, hay que tener aún más en cuenta que en otros casos los gustos del niño, lo que le llama la atención, sus intereses, sus posibilidades más que la edad en cuestión para la que está destinado el juguete.

Algunos consejos para comprar juguetes para niños con discapacidad son:

  • Que las funciones de os juguetes sean de fácil manejo. Esto permitirá que el niño pueda jugar también solo.
  • Con tiempos de respuesta amplios para que los niños puedan jugar con su ritmo de juego más lento.
  • De diseño sencillo. De este modo, el niño puede practicar la extrapolación y generalizar lo aprendido.
  • Atractivos y que no cansen. Esto permite al niño prestar atención e interés todo el rato que se está jugando.
  • Sin elevado grado de razonamiento y/o concentración.
  • Si son juguetes o juegos con reglas, es interesante que sea posible reducir el número o la complejidad de las mismas para que se puedan adaptar los niños con niveles cognitivos inferiores.