Anunciación.- Las mismas microondas que utilizamos para hablar por celular, que llevan la señal de radio a nuestras casas o que sirven para calentar la comida, también pueden ser empleadas por la industria de los alimentos con el fin de incrementar en segundos la calidad y rendimiento de los cereales y granos que a diario procesan, y que consumimos en diversos productos.
Juan de Dios Figueroa Cárdenas, científico del Centro de Investigación y de Estudios Avanzados (Cinvestav), estudió los efectos de las microondas e infrarrojos en la calidad de cereales y leguminosas de consistencia dura.
De acuerdo con el investigador, el problema que se suscita en el campo es que en muchas ocasiones se cosechan por diversas razones productos que no tienen la calidad apropiada, y para obtener una nueva variedad mejorada se necesita recurrir al mejoramiento genético, lo cual puede tardar de cinco a siete años, ya que se realizan varias cruzas hasta obtener el producto deseado.
En cambio, con el uso de las microondas se lograría un mejoramiento físico de los cereales y granos en  4 u 8 segundos, con lo que se tendría en poco tiempo un producto listo para procesar. Esta técnica, dijo, podría servir para elaborar  masa para tortillas a partir de maíces híbridos o sudamericanos, que son poco utilizados por su alta dureza.
Este método se puede utilizar en cereales, leguminosas, hortalizas, verduras, cebada, trigo, frijol, sorgo, garbanzo y legumbres, la única condición es que su estructura sea dura y posean una ínfima calidad.
El investigador acotó que la idea de este proceso surgió del hecho de aplicar las tecnologías que nos rodean para hacerlas eficientes en nuestro beneficio. “Necesitamos aplicar lo que viene del extranjero en sistemas productivos para nosotros, sino nunca saldremos del subdesarrollo”.

Centro de Investigación y de Estudios Avanzados (Cinvestav)Número telefónico: 5747 3800.