Anunciación.- A las 7:00 horas partió la camioneta hacia el sur de país, a Guerrero, específicamente a la Montaña, donde se encuentran las comunidades más afectadas, tanto por los desastres naturales como por la pobreza extrema.

Las carreteras aún desplomándose, las montañas húmedas por tanta lluvia y los caminos cortos fue lo que se vio durante el paso para llegar a dicha región.

Fueron siete horas de camino para llegar al Albergue Xicotencatl, ubicado en el municipio de José Joaquín de Herrera, uno de los 17 que conforman la Montaña.

La pobreza se siente, pero aún faltaba llegar a donde es más necesaria la ayuda. Después de pedir a las autoridades correspondientes la asesoría para trasladar el donativo en especie para casi dos mil personas, se acordó vernos al día siguiente, donde pasaría, al albergue, una camioneta para transportarnos a Axoloapan, ya que caminando es imposible llegar, pues los caminos siguen deslavados, húmedos, con mucha tierra.

Así es como llegaron mil 980 latas de atún que beneficiarán a alrededor de 30 familias de la comunidad de Axoloapan. Las latas fueron donadas por la Fundación para la Promoción del Altruismo IAP.

Las familias, que además de la pobreza extrema que viven, fueron afectadas por #Ingrid y #Manuel el pasado mes de septiembre, perdieron sus casas, que han improvisado algunas con ladrillos, así como sus cosechas, por lo que urge ayuda inmediata para que sobrevivan a una desgracia más.

Se decidió entregar este donativo a esta comunidad porque la Montaña es uno de los lugares más pobres del país, “pero nunca toman en cuenta estos poblados, por eso es necesario beneficiar a sus habitantes”, aseguró Rosendo Núñez, coordinador de la Unidad Académica de Hueycantenango de la Universidad de los Pueblos del Sur.

Informó que algunos habitantes de Axoloapan ya fueron desplazados con sus familiares a las comunidades de Zacatepec y Quetzalapa, “y se espera que se convenza al resto, ya que es una zona de alto riesgo”.

Tomás Esteban Cortéz Moreno, director de Servicios y Obras Públicas, brindó el apoyo necesario para realizar la entrega y explicó que lo más importante es sumar esfuerzos para atender a la población indígena del municipio, así como verificar los daños.

Informó que lo principal es donar alimento y medicamento, ya que, a raíz del desastre, las personas pueden enfermar, “es importante ir previniendo estas cuestiones”.

Por otra parte, Benigno Mauro Hernández, director del DIF Municipal, dijo que estos municipios y comunidades son muy pobres, “he solicitado despensas, pero me dicen que solo cuentan con 600 y no alcanza a llegar hasta las comunidades más lejanas, pues se quedan en el municipio”.

Hizo un llamado a ayudar a las comunidades más alejadas con medicina, comida y transporte.

A pesar de las dificultades para llegar a la comunidad de Axoloapan, las personas nos acogieron con mucho cariño en la explanada de la comisaría, después de unas palabras de aliento recibieron agradecidas las cajas de atún y las despensas que entregó el DIF Municipal.

Las señoras cargaban a sus hijos amamantándolos, quizá muchas de ellas padezcan desnutrición, los señores pedían, en su dialecto náhuatl, al representante del presidente municipal, Tomás Esteban Cortéz Moreno, la solución de sus problemas, él anotaba y quedó en regresar con una respuesta.

Algunos niños corrían por el campo, con sus pies descalzos jugaban y chupaban animadamente raspado. Se observaban algunas casas llenas de lodo, otras  más cuarteadas, rastros de lo que alguna vez fue un sembradío e incertidumbre por saber que será de su adorado Axoloapan.

Duele regresar sin haber llegado a las zonas inaccesibles. Miles de indígenas duermen a la intemperie, perdieron casas, cultivos y caminos.

No hubo modo de ir a ellos ni de que ellos vinieran a Axoloapan por alimento.

Universidad de los Pueblos del Sur, contacto: Profesor Rosendo Núñez, Pérez. Número telefónico: 04455 2749 2882 y 0155 5681 6783