Anunciación.- Con la finalidad de brindar más que colecciones bibliográficas, la Red Nacional de Bibliotecas Públicas ofrece espacios culturales para personas con discapacidad en 100 Salas Braille en el país, una sala de Silentes en Hidalgo y la reciente sala de Lenguaje de Señas en el Distrito Federal.
El Consejo Nacional para la Cultura y las Artes (Conaculta) recordó que a nivel nacional la red de bibliotecas está conformada por 31 redes estatales y 16 delegacionales que operan siete mil 388 bibliotecas para brindar servicios gratuitos a más de 30 millones de usuarios anualmente.
De acuerdo con el último Censo de Población y Vivienda del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), 5.1 por ciento de la población tiene algún tipo de discapacidad.
Respecto de las personas con discapacidad visual, precisó el Consejo, las entidades federativas que cuentan con mayor número de Salas Braille en sus bibliotecas son: Aguascalientes (10 salas), Jalisco (nueve salas) Coahuila (ocho salas), Michoacán (siete salas) Sonora (cinco salas) Guanajuato, Nuevo León y San Luis Potosí (cuatro salas).
El Estado de México, Hidalgo, Tamaulipas, Tlaxcala, Veracruz, Zacatecas, Campeche y Chihuahua; con dos salas, Nayarit, Durango, Morelos, Chiapas, Tabasco, Yucatán, Puebla y Quintana Roo tienen tres salas cada uno.
El estado de Oaxaca, Colima, Baja California Sur y Baja California cuentan únicamente con una sala cada uno. Mientras que en el Distrito Federal hay cinco espacios que brindan servicios gratuitos para las personas invidentes.
Además del catálogo en formato Braille con el que cuentan estas salas, se ofrecen otros servicios, como lecturas en voz alta, grabación de texto en audio, impresión de textos en Braille, conversión de texto a audio por medio de escáneres, préstamo de audiolibros y cintas.
También computadoras con acceso a Internet configuradas con un software parlante y amplificadores de imagen, así como orientación y apoyo para los usuarios.
La Red Nacional creó un nuevo modelo conocido como Bibliotecas Piloto que ofrecen un acervo y una infraestructura más amplios y actualizados por ejemplo para las personas con discapacidad motriz existen bibliotecas que cuentan con elevadores y rampas de acceso.
Recientemente se inauguró la Sala para Personas con Discapacidad Visual de la Biblioteca Vasconcelos en el DF, esta cuenta con mil 300 libros en Braille, 600 audiolibros y 400 audiocassettes.